La píldora contiene licopeno, un antioxidante natural que confiere al tomate su color rojo. Desde hace mucho tiempo los expertos recomiendan el licopeno como sustancia útil para la prevención de enfermedades, incluyendo algunos tipos de tumores y patologías cardiovasculares. Hay evidencias que apoyan que la dieta mediterránea, rica en tomate (otras verduras y aceite de oliva), es beneficiosa para la salud, gracias a la presencia de valiosos micronutrientes.
El licopeno es:
- Uno de los antioxidantes naturales, sustancias que se cree protegen las células del organismo de los factores ambientales perjudiciales.
- Se encuentra en los tomates, pero también en los albaricoques, sandía, papaya y pomelo rosado.
- Los contenidos de licopeno varían según la variedad de tomate y de la preparación, por ejemplo, salsa o Ketchup, o si el tomate está cocinado o crudo.
- No está claro que este suplemento pueda reemplazar o sustituir los beneficios de una dieta variada.
El experimento
Una empresa llamada CamNutra ha creado su “píldora de tomate”. Un equipo de investigación de la Universidad de Cambridge, que trabaja de manera independiente a CamNutra y financiado por el Wellcome Trust, la Fundación Británica del Corazón y el Instituto Nacional de Investigación en Salud, ha puesto a prueba esta píldora para ver si el resultado confirmaba la tesis de partida.
Se seleccionaron a 36 voluntarios con patologías cardiacas y 36 personas sanas. A todos se les administraba una píldora que podría ser de tomate o un placebo. Para asegurar la autenticidad del experimento, el contenido de los comprimidos no se reveló ni a los voluntarios ni a los investigadores hasta que después del estudio, que duró dos meses, llegaron a las conclusiones y alcanzaron los primeros resultados.
Para poder efectuar una comparación, los investigadores han medido el flujo sanguíneo del antebrazo, que es indicativo del riesgo cardiovascular futuro porque la presencia de vasos sanguíneos obstruidos puede conducir a ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
En los pacientes con patologías cardíacas, la píldora ha mejorado el flujo sanguíneo de manera significativa, mientras el placebo no tuvo el efecto deseado. Sin embargo, la píldora no influyó sobre la presión sanguínea, la rigidez arterial o en los niveles de grasa en sangre.
El investigador Josep Cheriyan dijo que los hallazgos, publicados en la revista PLOS ONE, son muy prometedores, sin embargo, añadió: “Una píldora de tomate al día no sustituye otros tratamientos, pero puede resultar beneficioso cuando se toma en combinación con otros medicamentos y se lleva a cabo un estilo de vida saludable”
“Todavía no podemos decir si una píldora podría reducir las enfermedades cardíacas, para esto es necesario realizar más experimentos, dirigidos a una determinación más precisa de sus propiedades”. El profesor Jeremy Pearson de la Fundación Británica del Corazón, dijo que existe la necesidad de llevar a cabo estudios más detallados para ver si esto podría convertirse en una opción viable para los pacientes.
Fuente: bbc.com