TOMATE FRESCO - Sobre telas lavables, preparar una solución con amoniaco y agua en la proporción de 4 cucharadas de amoniaco por cada litro de agua. Colocar esta solución en la zona manchada y frotar. Después, frotar con jabón de Marsella y por último lavar de forma normal. En caso de no tener amoniaco en casa, calentar un poco de leche, distribuirla sobre la mancha y dejar actuar al menos media hora antes de lavarlo.
MANCHA DE KETCHUP - Pasar primero por agua fría. Posteriormente, coger vinagre blanco y diluir al 50% con agua. Verter esta solución sobre la mancha, dejar reposar aproximadamente un ahora y después lavar. Si la mancha no ha desaparecido, puede repetir la operación con vinagre solo, dejándolo reposar durante un par de horas antes de lavar.
MANCHAS DE SALSA DE TOMATE - Todos sabemos que este tipo de manchas son muy fastidiosas, porque en la salsa no está presente solo el tomate sino también el aceite, ¿no es así? En este caso, la primera operación que debemos hacer es poner un poco de polvos de talco sobre la mancha sin utilizar agua, limitándose a cubrir la mancha con los polvos, dejar así durante unas dos horas y después cepillar la mancha. Posteriormente frotar la mancha con un trapo empapado en una solución de agua con amoníaco (como se describe más arriba) y después lavar como de costumbre.